Digo esto porque hace poco volví a revisar "Asesinato por decreto" y muchas escenas no habían sido dobladas al castellano (supongo que por posibles molestias a la Monarquía británica respecto a las motivaciones que llevaron a Jack el Destripador a cometer sus horribles crímenes). En "Desde el infierno", desde el primer momento, esto no es un impedimento. Nos enteramos del peligro que se cierne sobre Ann Crook y que se extiende al resto del círculo de sus compañeras más íntimas. Sólo que aquí Sherlock Holmes y John Watson son sustituidos por dos policías de Scotland Yard: Frederick Abberline (inmenso Johnny Depp como prácticamente siempre y cuyas visiones seguramente reemplazan a las del personaje de Robert Lees) y el sargento Godley. Además, el ambiente en que se mueven las prostitutas y su desesperación y miedo son mucho más reales.
Y pese a que conozcamos la trama e incluso intuyamos pronto la identidad del asesino, tiene un guión y una atmósfera lo suficientemente interesantes como para que queramos seguir viéndola. Tampoco Ian Richardson es tan arisco como Anthony Quayle en el papel del jefe Sir Charles Warren, pese a lo que el caso implica para él en lo personal.
Incluso "Desde el infierno" es más sangrienta y explícita, aunque sólo sea a destellos como los del instrumental utilizado por el Destripador. Un recurso suficiente para poder imaginarnos la brutalidad de las matanzas.
Por todo ello no puedo bajar su nota respecto a "Asesinato por decreto".
Mi nota: 8,7