Ante todo confieso mi admiración sincera por este genio de la interpretación. Su expresividad y camaleonismo sólo es equiparable a su talento para la escena.
Inmenso Carrey en su papel, "devora" la pantalla con su presencia.
Es impresionante como logra descolocar al personal.. no sabes si estas ante un perturbado peligroso, ante un pobre diablo de quien sentir lástima, ante un angel o un demonio.
Invitaría a los más críticos con la película a que la vean de nuevo con otro ojos... disfrutad de Carrey.... psicodelia pura... solo ver la escena del Karaoke... es que no hay palabras!!


Por cierto, el título en castellano, lamentable.