Parece que en ciertos círculos donde la cultura jamás puede ir al lado del humor, está mal visto considerar que hay películas del género cómico que son auténticas obras maestras. No acabó todo con Chaplin, los Monty Python y Peter Sellers, faltaría más.

La pareja formada por David Zucker y Jim Abrahams (aquí director y guionista, respectivamente) se dio a conocer gracias a la fabulosa Aterriza como puedas y, más tarde, se hicieron con un sitio importante en Hollywood gracias a Top Secret! Entre ambas películas, lanzaron por televisión una serie llamada Police Squad!, en la que veíamos las primeras aventuras de Frank Drebin y que, curiosamente, tuvo una mala acogida por parte de la misma audiencia que tiempo después encumbraria Agárralo como puedas, una película que jamás pretende estar por encima del espectador pero tampoco por debajo. El humor inteligente no se basa única y exclusivamente en finas ironías que solo los más espabilados pueden entender, sino que también se considera humor inteligente aquel que es inteligente para hacer reír, a secas. Eso, que parece tan sencillo, es algo que hemos visto fallar en montones de películas que han nacido de la semilla del cine que "refundaron" Zucker y Abrahams. Estos dos cracks encontraron el momento justo y fueron, a su modo, unos visionarios: había un humor irreverente, escatológico, crítico, cínico, incontenible y muy sano que jamás se había puesto ante los espectadores con tantísimo oficio. Las situaciones más absurdas que pueda uno ver, los diálogos más extraños y mejor hilados y el mejor humor visual en mucho tiempo, son parte del legado de una película que ha marcado a varias generaciones. Y todavía sigue marcando a muchas más.

Leslie Nielsen hace su trabajo más recordado. Nielsen jamás fue un actor propiamente dicho, pero fue uno de los mejores cómicos que ha tenido la suficiente capacidad para ponerse ante una cámara. Sus gags, sobre los que descansa gran parte del metraje, son de los más recordados y repetidos por los amantes del cine de este género. Priscila Presley, hermosa mujer de talento más bien limitado que saltó a la fama tras casarse con el gran Elvis Presley, hace aquí también su papel más recordado en el cine y bueno, no está tan mal como en otras ocasiones. El gran (nunca mejor dicho) George Kennedy está fabuloso, sacando su mejor lado cómico. Ricardo Montalbán, acertadísimo en un papel en el que encaja a la perfección. Destacar, por último, la aparición de O.J. Simpson, actor famoso, sobretodo, por el caso del asesinato de su ex-esposa, del que salió inocente en el juicio criminal. Más tarde no tendría tanta suerte, tras ser declarado culpable de robo e intento de secuestro en 2008.

Resumiendo, que es gerundio: Agárralo como puedas puede no gustar, pero hace falta tenerlos cuadrados para calificarla como mala. Para mí y para la gran mayoría de la gente que conozco, es una auténtica obra maestra. Para la minoría restante, es una mierda sin sentido.