Nop
6,0
17.687
Intriga. Fantástico. Terror
Dos rancheros de un remoto pueblo del interior de California hacen un descubrimiento tan insólito como escalofriante.
12 de agosto de 2022
12 de agosto de 2022
266 de 381 usuarios han encontrado esta crítica útil
Que Jordan Peele es uno de los directores más controvertidos de los últimos años en el género de terror creo que es indiscutible. Siempre arriesga en sus historias y no deja al espectador indiferente (para bien o para mal), y "Nope" no es la excepción.
La historia comienza de una manera realmente inquietante, captando la atención y el interés de un espectador dispuesto a disfrutar de algo diferente e intrigante. Sin embargo, uno no tarda en darse cuenta que este inicio solo ha servido para dar paso a una hora de desarrollo insulsa, sin gracia, lenta y que solo sirve para que la atención que antes había conseguido se diluya en una desesperación por que pase algo que merezca la pena ver. Tras esta soporífera y extremadamente larga introducción de personajes e historia a la que le sobran muchísimos minutos, se intercalan escenas curiosas e incluso algunas destacables con más lagunas de metraje que te sacan completamente de la historia y te hacen perder en gran parte el interés por saber por dónde van a ir los tiros. En resumen, la película tiene, a mi parecer, un grave problema de ritmo.
Dejando a un lado el guion y si nos centramos en los personajes, creo que Daniel Kaluuya y Keke Palmer reflejan perfectamente la dualidad opuesta de dos personas que han sufrido una reciente pérdida. Él, sin ánimos por nada, deprimido, sin energías, sin motivación. Ella, excesivamente cargante, hiperactiva, de alegría casi histérica. Me ha parecido una reflexión bastante atrayente de cómo un mismo hecho puede afectar de forma contraria a las personas. Creo que la evolución de su relación es de lo más atractivo que tiene la película.
Por otro lado, los efectos especiales y la ambientación de la casa y el parque en medio de la nada semi desolada de Estados Unidos están realmente logrados. El apartado de sonido es otro de los puntos fuertes del fin, especialmente en los momentos de tensión con los que cuenta la cinta.
No obstante, creo que es un error catalogar la película dentro del género de terror. La película intenta mezclar varios géneros, entre ellos la ciencia ficción, comedia e incluso, aventura. Y creo que no consigue que casen del todo, haciendo que la historia deambule por todos ellos y al mismo tiempo por ninguno.
En definitiva, luces y sombras que hacen que algo que podría haber sido destacable se quede en el vacío sobre todo por un mal ritmo.
La historia comienza de una manera realmente inquietante, captando la atención y el interés de un espectador dispuesto a disfrutar de algo diferente e intrigante. Sin embargo, uno no tarda en darse cuenta que este inicio solo ha servido para dar paso a una hora de desarrollo insulsa, sin gracia, lenta y que solo sirve para que la atención que antes había conseguido se diluya en una desesperación por que pase algo que merezca la pena ver. Tras esta soporífera y extremadamente larga introducción de personajes e historia a la que le sobran muchísimos minutos, se intercalan escenas curiosas e incluso algunas destacables con más lagunas de metraje que te sacan completamente de la historia y te hacen perder en gran parte el interés por saber por dónde van a ir los tiros. En resumen, la película tiene, a mi parecer, un grave problema de ritmo.
Dejando a un lado el guion y si nos centramos en los personajes, creo que Daniel Kaluuya y Keke Palmer reflejan perfectamente la dualidad opuesta de dos personas que han sufrido una reciente pérdida. Él, sin ánimos por nada, deprimido, sin energías, sin motivación. Ella, excesivamente cargante, hiperactiva, de alegría casi histérica. Me ha parecido una reflexión bastante atrayente de cómo un mismo hecho puede afectar de forma contraria a las personas. Creo que la evolución de su relación es de lo más atractivo que tiene la película.
Por otro lado, los efectos especiales y la ambientación de la casa y el parque en medio de la nada semi desolada de Estados Unidos están realmente logrados. El apartado de sonido es otro de los puntos fuertes del fin, especialmente en los momentos de tensión con los que cuenta la cinta.
No obstante, creo que es un error catalogar la película dentro del género de terror. La película intenta mezclar varios géneros, entre ellos la ciencia ficción, comedia e incluso, aventura. Y creo que no consigue que casen del todo, haciendo que la historia deambule por todos ellos y al mismo tiempo por ninguno.
En definitiva, luces y sombras que hacen que algo que podría haber sido destacable se quede en el vacío sobre todo por un mal ritmo.
22 de agosto de 2022
22 de agosto de 2022
191 de 281 usuarios han encontrado esta crítica útil
Acudí al cine a ver esta película con cierta expectación; del director de 'Déjame salir', que me gustó mucho en su momento, y con una temática de ovnis aparentemente orientada al terror que llamó mi atención.
La decepción fue mayúscula. Una broma de película empezando por la absurdidad del título. Guion flojísimo, personajes forzados y poco creíbles y, en general, una historia que si bien al principio parece prometer algo interesante, va decayendo constantemente hasta terminar en 2 horas y 10 minutos de metraje que se hace bastante largo.
Decir que 'Nop' es de terror es un insulto grave a lo que la propia palabra 'terror' significa. Por momentos sí se genera algo de intriga/suspense, pero de forma muy superficial e intermitente. Para colmo el director intenta teñir demasiadas escenas con "humor" (del malo) que hace que las situaciones se vuelvan más ridículas de lo que ya son.
En fin, Jordan Peele se pierde en simbolismos tratando de transmitir un mensaje al espectador que termina haciéndose de forma confusa y pesada. Película intrascendente, pretenciosa y totalmente olvidable.
La decepción fue mayúscula. Una broma de película empezando por la absurdidad del título. Guion flojísimo, personajes forzados y poco creíbles y, en general, una historia que si bien al principio parece prometer algo interesante, va decayendo constantemente hasta terminar en 2 horas y 10 minutos de metraje que se hace bastante largo.
Decir que 'Nop' es de terror es un insulto grave a lo que la propia palabra 'terror' significa. Por momentos sí se genera algo de intriga/suspense, pero de forma muy superficial e intermitente. Para colmo el director intenta teñir demasiadas escenas con "humor" (del malo) que hace que las situaciones se vuelvan más ridículas de lo que ya son.
En fin, Jordan Peele se pierde en simbolismos tratando de transmitir un mensaje al espectador que termina haciéndose de forma confusa y pesada. Película intrascendente, pretenciosa y totalmente olvidable.
20 de agosto de 2022
20 de agosto de 2022
170 de 276 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hay que ver lo que "engaña" un tráiler, iba toda ilusionada a ver una peli de terror y he pasado 2 horas y cuarto intentando descifrar lo que estaba presenciando. Daniel Kaluuya no cambia de registro durante todo el filme, el parque de atracciones me recordaba a Tabernas (Almería).
Me ha gustado la banda sonora.
Me ha gustado la banda sonora.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
El bicho parecía una medusa, otras veces una seta y ya si hablo del mono asesino del principio... ya pa qué.
Lástima de dinero y tiempo desaprovechado.
Gracias por leerme.
Lástima de dinero y tiempo desaprovechado.
Gracias por leerme.
21 de agosto de 2022
21 de agosto de 2022
139 de 221 usuarios han encontrado esta crítica útil
Para mí es un “síp” en toda regla. Es cierto que el tráiler resulta engañoso. Me pasó lo mismo con “El renacido”: habían cogido gran parte de las escenas de acción más trepidantes y las habían concentrado en dos minutos. Luego, cuando la veías, te dabas cuenta que todas y cada una de las escenas de acción que habías visto en el tráiler eran todas las escenas que ibas a ver y estaban desperdigadas en dos horas y pico de metraje. Y que, como “Nop”, se trataba de una película de ritmo lento, cocido a fuego lento. Dicho esto, ¿de quién es la culpa? ¿Del director y su película o del equipo que se encarga de hacer los tráileres? Pues eso.
Para mí es un gran thriller sobrenatural, con escenas impactantes y un gran sentido de la puesta en escena. Como ha dicho ya alguien antes, es una revisión actualizada, de siglo XXI, de “Tiburón”: mientras que en “Tiburón” se limitaban a dar caza a algo, aquí hay que, además, grabarlo. Muy de nuestra época. Todo esto se conecta con una reflexión elaborada sobre el poder de la imagen, sobre la mirada, sobre el acto de grabar y registrarlo absolutamente todo, hasta aquello imposible de capturar (como testimonia el personaje del director de documentales). Y luego tenemos a Peele siendo levemente irónico (sin pasarse, que hubiera sido lo más fácil) o revisitando lugares comundes del cine. Finalmente señalar la magnífica fotografía, labor con la cámara y reparto.
Sigo en spoiler para tratar un punto relevante de la trama.
Para mí es un gran thriller sobrenatural, con escenas impactantes y un gran sentido de la puesta en escena. Como ha dicho ya alguien antes, es una revisión actualizada, de siglo XXI, de “Tiburón”: mientras que en “Tiburón” se limitaban a dar caza a algo, aquí hay que, además, grabarlo. Muy de nuestra época. Todo esto se conecta con una reflexión elaborada sobre el poder de la imagen, sobre la mirada, sobre el acto de grabar y registrarlo absolutamente todo, hasta aquello imposible de capturar (como testimonia el personaje del director de documentales). Y luego tenemos a Peele siendo levemente irónico (sin pasarse, que hubiera sido lo más fácil) o revisitando lugares comundes del cine. Finalmente señalar la magnífica fotografía, labor con la cámara y reparto.
Sigo en spoiler para tratar un punto relevante de la trama.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Lo del mono. Los hay que se han dedicado a decir que eso no pinta nada en la historia, que es gratuito para generar un suspense que Peele no acaba de rematar. Y los hay que piensan que tiene que estar forzosamente conectado a lo del alien. Para mí está claro: ni una cosa ni la otra. El personaje de Steven Yeun, de pequeño, estuvo en contacto con un hecho que podríamos calificar de sobrenatural (el mono descontrolado, la zapatilla apuntando hacia el cielo). Eso le marcó profundamente, como se nos deja entrever en la escena que tiene lugar en su museo. Y eso le empujó a seguir buscando y buscando otra experiencia igual. Hasta que la encuentra en Aguadulce y monta ahí su feria ambulante. La única diferencia respecto al episodio con el mono es que esta vez no sobrevive a su tete-a-tete con lo sobrenatural.
25 de agosto de 2022
25 de agosto de 2022
95 de 137 usuarios han encontrado esta crítica útil
La sensación de extrañamiento que provoca la película en sus primeros compases resulta tan chocante, que puede ser que pienses que te has equivocado de película. Pero no, simplemente estas ante Jordan Peele, uno de los cineastas más interesantes de los últimos años.
La crítica más común que uno puede encontrarse en lo referente a “Nope”, es que es su película más sencilla, de alienígenas veraniega únicamente para pasárselo bien, y lo cierto es que nunca he visto una opinión que se aleje más de la realidad. Jordan Peele siempre disfraza sus temas complejos con películas aparentemente de género, pero aquí lo ha llevado a un nuevo nivel. Sin embargo, debo reservarme los detalles para el spoiler, puesto que me resulta imposible explicarlo sin entrar en ellos. Únicamente diré que la domesticación de la naturaleza es el tema central de la película, que permea cada personaje y escena de forma casi obsesiva, por muy superflua que pueda parecer a simple vista, enganchando un principio un tanto chocante con una trama difícil. El guion se muestra, por tanto, igual de complejo, funcionando a múltiples niveles enlazados entre sí, como una caja china.
En términos de dirección, combina de forma increíble escenas cargadas de tensión con la acción más espectacular, demostrando una gran pericia en el montaje y la fotografía. Las escenas de terror son escalofriantes, amparadas por un diseño de sonido portentoso.
La combinación de todos estos elementos resulta en un cóctel explosivo, dando lugar a una película en apariencia espectacular, pero llena de corazón y cerebro. Extremadamente recomendable.
La crítica más común que uno puede encontrarse en lo referente a “Nope”, es que es su película más sencilla, de alienígenas veraniega únicamente para pasárselo bien, y lo cierto es que nunca he visto una opinión que se aleje más de la realidad. Jordan Peele siempre disfraza sus temas complejos con películas aparentemente de género, pero aquí lo ha llevado a un nuevo nivel. Sin embargo, debo reservarme los detalles para el spoiler, puesto que me resulta imposible explicarlo sin entrar en ellos. Únicamente diré que la domesticación de la naturaleza es el tema central de la película, que permea cada personaje y escena de forma casi obsesiva, por muy superflua que pueda parecer a simple vista, enganchando un principio un tanto chocante con una trama difícil. El guion se muestra, por tanto, igual de complejo, funcionando a múltiples niveles enlazados entre sí, como una caja china.
En términos de dirección, combina de forma increíble escenas cargadas de tensión con la acción más espectacular, demostrando una gran pericia en el montaje y la fotografía. Las escenas de terror son escalofriantes, amparadas por un diseño de sonido portentoso.
La combinación de todos estos elementos resulta en un cóctel explosivo, dando lugar a una película en apariencia espectacular, pero llena de corazón y cerebro. Extremadamente recomendable.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
La película abre con una escena que sobrevolará el resto del metraje: un mono, chillando y cubierto de sangre, que se pasea de un lado a otro del decorado de una bonita serie cursi. Y en el centro del encuadre, un zapato en vertical, extraño e imposible. El zapato y la película tienen un cierto paralelismo; un equilibrio imposible de conceptos en apariencia extraños.
El tema de la película puede resultar difícil de descifrar, pero, prestando atención a los personajes, es posible esclarecerlo. El protagonista (interpretado soberbiamente por Daniel Kaluuya), el cineasta y Jupe (Steven Yeun), buscan exactamente lo mismo: la domesticación y la captación de lo salvaje. Y lo cierto es que muchas escenas de la película giran en torno a esa cuestión: Daniel, que, como domador de caballos, no creo que necesite más explicación; el cineasta, tratando de dominar, con sus cámaras y el montaje, la esquiva naturaleza salvaje de la muerte (todas sus escenas son sobre la caza de un animal), hasta el punto de querer morir él para captarlo, y el propio Jupe, tratando de revivir aquello que tenía con Gordi (que sólo pudo durar un breve instante). La hermana (Keke Palmer), como la hermana rebelde y salvaje que no se dejó amaestrar por su padre. El tema recurrente del jockey negro, cabalgando libre a pesar de la opresión que recibiría por el color de su piel, no hace más que reforzar esa suposición.
El temple demostrado por el personaje de Daniel es el del domador. Nunca grita, nunca se deja llevar, tiene la mente fría, y es el único capaz de razonar sobre el comportamiento de la bestia; pues es lo que lleva haciendo toda la vida. Llama poderosamente la atención la facilidad con la que deja al motorista morir, porque sabe que, racionalmente, es imposible sacarlo de allí. Otra escena parecida es la que hay cerca del final, cuando tiene que atraer al monstruo para que su hermana escape. Es capaz de mirarlo a la cara sin pestañear. Incluso en la escena de la cuadra con las luces apagadas (terrorífica, por cierto), tiene la suficiente sangre fría como para sacar el móvil y grabar, aunque luego resulte que no son alienígenas de verdad. Es hasta capaz de dormir justo debajo del alienígena, tan tranquilo.
El duelo final entre el alien y los hermanos sigue algunos elementos del western, como la carrera a caballo, el poblado, pero con elementos de extrañamiento y distanciamiento, como es que el pueblo sea falso, de plástico, y que la figura que cabalga no sea la del sheriff con un cigarrillo, sino Daniel, como el jockey negro.
El tema de la película puede resultar difícil de descifrar, pero, prestando atención a los personajes, es posible esclarecerlo. El protagonista (interpretado soberbiamente por Daniel Kaluuya), el cineasta y Jupe (Steven Yeun), buscan exactamente lo mismo: la domesticación y la captación de lo salvaje. Y lo cierto es que muchas escenas de la película giran en torno a esa cuestión: Daniel, que, como domador de caballos, no creo que necesite más explicación; el cineasta, tratando de dominar, con sus cámaras y el montaje, la esquiva naturaleza salvaje de la muerte (todas sus escenas son sobre la caza de un animal), hasta el punto de querer morir él para captarlo, y el propio Jupe, tratando de revivir aquello que tenía con Gordi (que sólo pudo durar un breve instante). La hermana (Keke Palmer), como la hermana rebelde y salvaje que no se dejó amaestrar por su padre. El tema recurrente del jockey negro, cabalgando libre a pesar de la opresión que recibiría por el color de su piel, no hace más que reforzar esa suposición.
El temple demostrado por el personaje de Daniel es el del domador. Nunca grita, nunca se deja llevar, tiene la mente fría, y es el único capaz de razonar sobre el comportamiento de la bestia; pues es lo que lleva haciendo toda la vida. Llama poderosamente la atención la facilidad con la que deja al motorista morir, porque sabe que, racionalmente, es imposible sacarlo de allí. Otra escena parecida es la que hay cerca del final, cuando tiene que atraer al monstruo para que su hermana escape. Es capaz de mirarlo a la cara sin pestañear. Incluso en la escena de la cuadra con las luces apagadas (terrorífica, por cierto), tiene la suficiente sangre fría como para sacar el móvil y grabar, aunque luego resulte que no son alienígenas de verdad. Es hasta capaz de dormir justo debajo del alienígena, tan tranquilo.
El duelo final entre el alien y los hermanos sigue algunos elementos del western, como la carrera a caballo, el poblado, pero con elementos de extrañamiento y distanciamiento, como es que el pueblo sea falso, de plástico, y que la figura que cabalga no sea la del sheriff con un cigarrillo, sino Daniel, como el jockey negro.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here