Una curiosa colaboración entre Soffici y Amadori, hacen de este vodevil algo ágil, picaresco, moderno para su tiempo, no juzgan a los amantes, sobre todo a la cancionista, todo lo tocan en un tono de farsa.
Acá según Di Núbila es cuando se consolida el estilo y personaje de Pepe Arias que luego replicaría en el resto de sus películas.
Simpática las dos historias de amor, sobre todo la de Alicia Vignli y José Gola, dos sinvergüenzas tan simpáticos como cínicos.
Es curioso y bastante atípico el final del personaje de Arias, no me lo esperaba realmente, cambian por completo el matiz de la historia