Si bueno, los falsos documentales no me gustan mucho; pero este resulta en una mezcla bastante exótica que le da un saborcillo raro. La verdad me ha sacado un par de risas.
Es de esos productos que sabes que es ¿malo?, pero que te da risa. Vamos, que aquí hay poco material para una verdadera crítica de argumentos técnicos. Entre concurso televisivo, video juego, reality show y documental la suma resulta hasta interesante, incluso puede que bastante fresco.

No he podido pasar del cuarto capítulo, aunque he visto trozos de los siguientes por si veía alguna mejora y reengancharme, pero no ha sido así.

Un gran hermano rodado con zombies, con interpretaciones mediocres, eso sí, los actores han hecho 'cardio' para casi toda su vida, ya que se limitan a gritar, chillar y correr escapando de los muertos vivientes.
Lo mejor que puede tener es que puede hacer pensar al espectador lo que haría en cada situación, y lo peor, es que a ninguno de los personajes se les pasa por la cabeza endiñar un botellazo, clavar un palo de escoba, dar un sartenazo o coger cualquier arma punzante o contundente para defenderse, solo empujones y carreras sin cesar.
Eso fué lo que me aburrió hasta el límite de pasar de la serie.

Destacable el trabajo de edición y montaje, eso sí, se lo han currado, pero el resultado ha sido totalmente decepcionante para un servidor.

Wolf.

Es una serie/falso reality que te gustará o no en función de las expectativas con las que la veas. La premisa es fingir que un grupo de famosos reales (para el espectador occidental que sean reales o no no influye mucho porque no los conocerá) se deben enfrentar a un escenario de apocalipsis zombie. La novedad reside en que el trato que se le da a la serie es como si fuera un reality/concurso con misiones y subtítulos descriptivos de la “producción” al espectador.

A mi me ha gustado porque no esperaba una obra maestra, es un producto original que entretiene. Hay muchos momentos divertidos porque los protagonistas no son supervivientes épicos, sino gente cobarde e insegura a la que le da la risa cuando les pillan en alguna mentira para no jugarse al pellejo.

7/10

Le tenía muchas ganas a Zombiverso, producción coreana de Netflix, y que se ha vendido como un reality con zombis, cuando en realidad es una serie que juega a ser un falso reality con zombis. Despejada la decepción inicial, ya que la idea de un reality con zombis prometía demasiado, podría haber perdonado ese importante aspecto, si no fuera porque no hay por dónde coger a este extraño experimento.

Ya de entrada es muy raro que quieran hacer ver que es un reality, donde las decisiones de los personajes principales importan, cuando sabes que está todo guionizado y la tensión es inexistente. ¿No habría tenido más sentido hacer un reality con concursantes anónimos, jugando con la espontaneidad y haciéndolo todo más impredecible? Pues no, siendo el recurso del reality una excusa para que los aspectos técnicos de la serie sean más baratos y, por lo tanto, más mediocres, en un producto decididamente pobre, y que no está a la altura de lo que nos suele ofrecer Corea del Sur.

No ayuda que las actuaciones sean poco verosímiles, con uno de los actores riéndose todo el rato mientras los zombis acechan. Sabemos que esto es falso y es una serie, pero saca totalmente de la serie, porque si lo que intentan es ser graciosos, no lo consiguen, y si lo que quieren es que nos lo tomemos en serio, menos todavía, en un experimento fallido que no sabe muy bien qué quiere ser.

Una buena idea pésimamente ejecutada, y que sentencia un producto que es mejor que olvidemos cuanto antes, porque es una pérdida de tiempo y un quiero y no puedo de manual. No todo vale, y este falso reality debería haber apostado por ser precisamente eso, un reality con zombis, pero al final ha acabado siendo una mala serie con zombis. Una pena.

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