Película biográfica en la que el famoso torero de entonces Palomo Linares se interpreta a sí mismo, y no lo hace mal, "Nuevo en esta plaza" se ve más que por su calidad cinematográfica, escasa, por ser un buen documento del cine patrio de los años sesenta. Al estilo de hombre hecho a sí mismo, vemos cómo Palomo Linares se abre camino en el difícil camino de los toros, siendo incluso un espontáneo, pero manteniendo sus principios, su honradez y su sencillez que le hace mantener sus amigos de la infancia.

"Nuevo en esta plaza" está arropado por una serie de grandes actores , Bódalo, Alfredo Landa, Julia Gutiérrez Caba, Manuel Gómez Bur y dirigida por el prolífico artesano Pedro Lazaga, solo interesará a los aficionados a los toros y a aquellos que quieran recordar con nostalgia el cine que se hacía en España a finales de los sesenta.

Eso sí, la canción de "Palomooo Linaaares" es muy pegadiza.

Cuando no te gustan los toros, es mucho más complicado que te pueda enganchar una película que trata, básicamente, sobre ese asunto. Me ocurre lo mismo con el boxeo o la caza. El tema ya me tira para atrás.

Sin embargo, Pedro Lazaga consigue hilvanar una historia muy entretenida e interesante, uniendo cortes de corridas de toros originales con la puesta en escena en sí, sin que apenas se note.

Me molesta que se doblen las voces originales. Con lo bonito y auténtico que es el acento andaluz, no entiendo que se renunciara al mismo en pos de un acento estándar de no se sabe muy bien donde.

Por último, el elenco de actores de esta película es fantástico: Bódalo, Landa, Pepe Sacristán…

Pedro Lazaga fue un director muy popular pero que quedó como director de tercera para la crítica.
Era Pedro un especialista en las clásicas películas españolas de los años 60 y 70 del siglo pasado, pero fue mejor director de lo dicho por la siempre sesuda crítica.
Si, hizo muchos subproductos con guiones infames, pero en su cine se vislumbra un gran narrador y tiene incluso buenas películas.
Esta de la que escribimos sobre la vida del gran Palomo Linares no está mal y vemos la España del franquismo dónde se encumbraba a folclóricas, toreros y todo lo necesario para tapar las miserias de la dictadura...
Como película en sí está muy bien rodada y vale como documento histórico de la España del siglo pasado y tiene grandes actores, incluso Palomo hace un buen papel.

Crítica de Nuevo en esta plaza (1966).-

Hay películas que, más allá de su calidad cinematográfica, tienen un valor especial por lo que representan. Nuevo en esta plaza (1966), dirigida por Pedro Lazaga, es una de ellas. La cinta, protagonizada por el torero Sebastián Palomo Linares en su debut en la gran pantalla, nos sumerge en la dureza y la emoción del mundo de los ruedos en la España de los años 60.

Lo mejor.

Uno de los aspectos más llamativos de la película es su autenticidad. Al contar con Palomo Linares en el papel principal, las escenas taurinas tienen un realismo que pocas películas del género han logrado. Además, la dirección de Pedro Lazaga es sólida y consigue capturar esa mezcla de ilusión, sacrificio y peligro que envuelve a quienes sueñan con triunfar en los ruedos. La fotografía también juega un papel importante, reflejando la esencia de la época y la intensidad de la plaza.

Otro punto a favor es la historia en sí misma: el relato de un joven que lucha por hacerse un nombre en un mundo tan exigente siempre resulta atractivo, aunque la trama en ocasiones pueda ser predecible.

Lo menos conseguido.

Sin embargo, la película tiene ciertos altibajos. El ritmo no siempre es el mejor, con algunas escenas que se sienten algo alargadas y momentos en los que falta intensidad en la evolución del protagonista. Además, aunque Palomo Linares aporta realismo, su interpretación es más bien discreta, algo comprensible dado que no era actor profesional.

Conclusión.

Nuevo en esta plaza es una película interesante, sobre todo para quienes disfrutan del cine clásico español o sienten curiosidad por el mundo taurino. No es perfecta, pero tiene un encanto especial y refleja con acierto la pasión y el esfuerzo que hay detrás del toreo. Si buscas una historia con alma y una mirada nostálgica a esa España de los 60, esta puede ser una buena opción.

Nota: 7/10.