De lo mejor en su género. Zeke y Luther no es una producción "It's a laugh productions" y se nota. Si las producciones como "Los Magos de Waverly place" "Zack y Cody" "Hannah Montana" tienen un punto empalagoso e insoportable, con tanto noviete/ta arriba y abajo, en "Zeke y Luther" se centran mucho más en las tonterías que hacen dos skates para conseguir apoyo económico, fama, dinero y, como es lógico, chicas. Parecen un trasunto de los personajes de Ibañez, por las tonterías que hacen y las cosas que les ocurren.

Sus aventuras son muy divertidas, desde atravesar un foso con tiburones con un skate, enfrentarse a los matones del barrio, participar en concursos, batir records, inventar la modalidad de salto de trampoliín con skate, soportar admiradoras plastas y acosadoras, a un vecino astronauta realmente peligroso (al que le roban un cohete y se lo ponen en el skate).

Si el actor "guapo" es soportable, es Adam Hicks (Luther) en que se lleva la palma, ya que es el amigo descerebrado, infantil, medio loco... el episodio en que participa en una especie de "Power Rangers" o cuando se transforma por hipnosis en un "Latin Lover" trasnochado o en un rapero sonámbulo son la bomba...

Junto a ellos un elenco de secundarios graciosos, desde la hermana pequeña e insoportable por su maldad, el amigo Koyo (un remedo de Patricio), el tirillas, el dueño de la cadena de donuts ...

Realmente divertida. Su presentación con música ska ya da una pista de por donde van los tiros... a un entretenimiento sano, sin mojigaterías, sin empalagos y con mucha creatividad en los guiones...