Lo mejor de esta película es que Geneviève Bujold acapara buena parte de los planos (con una interpretación exquisita y una belleza mesmerizante), y lo peor es que es aburrida como el culo de un perro. Se vende desde el póster como un thriller, pero no hay ni cinco minutos de verdadero thrill que te corte el aliento. Todo es bastante plano, monótono y mortecino en esta historia que nunca acaba de arrancar, aunque el director, hay que reconocerlo, logra meternos con Isabel en ese pueblito costero de Canadá (captado con gélido realismo) y crear algo parecido a una atmósfera de secretos y amenazas latentes. Se puede ver en YouTube con aceptable calidad, pero yo no me sometería a esto si no fuera muy muy fan de la actriz de "Coma" e "Inseparables". Cuidado.