"El fugitivo", la película que protagonizaran en 1993 un atractivo Harrison Ford como el doctor Richard Kimble y un frenético y perfecto Tommy Lee Jones como el Marshal Sam Gerard, es una de mis películas favoritas de los 90. Siempre me ha encantado y no me canso de verla.

Esta segunda parte, también protagonizada por Jones y casi todo el mismo equipo de Marshals de la primera parte, está muy entretenida aunque puede hacerse algo larga, entretiene, no para desde el minuto uno, no te deja respirar y tiene unas espectaculares escenas de acción como las del accidente de avión o las del tren que merecen la pena, aunque la película para mí no llega al nivel de la primera.

Tommy Lee Jones me gusta mucho y este papel le va como anillo al dedo, se come la pantalla cada vez que sale y es una clave importantísima para que la película se deje ver y se disfrute.

Junto a él tenemos esta vez a un correcto Wesley Snipes al que se le dan de miedo este tipo de papeles de acción. El actor, cada vez más desaparecido de las pantallas de cine, está atractivo y creíble como el perseguido de turno.

A ellos se une un Robert Downey Jr. que estaba en su peor momento de adicción a las drogas y que dio algún que otro dolor de cabeza al director faltando en alguna ocasión al rodaje y retrasando la filmación de alguna que otra escena relevante como la del hospital. Downey Jr. recordaría este rodaje como una auténtica pesadilla y lo peor que le podía haber pasado en el momento en el que estaba personalmente.

Repite Joe Pantoliano como uno de los Marshals de Tommy Lee Jones, podemos ver a la que es mujer del actor Samuel L. Jackson, LaTanya Richardson, como otro miembro del equipo de Lee, a Kate Nelligan, de nuevo, muy desaprovechada y a la francesa y bella Irène Jacob como pareja de Snipes en su incursión en el cine americano, deseosa como estaba de saber lo que era participar en una película de acción de esta magnitud.
Un saludo,
Tess