Este film desde mi punto de vista debería formar parte de toda selección de las mejores películas de terror de la historia, y por supuesto de la filmografía mexicana de terror (junto a HASTA EL VIENTO TIENE MIEDO de 1968 y CRONOS de 1993). Sin duda no todas las interpretaciones de la cinta son buenas y la edición es muy mejorable. En todo caso la interpretación de Cecilia Pezet (Sor María) es excelente y natural y el argumento muy bien trabado, aunque como digo podría haberse editado mejor lo que ayudaría a entrar con más facilidad en el ambiente de la película. Se trata en definitiva de una religiosa que debido a una enfermedad comienza a delirar viendo visiones diabólicas y siendo poseída por una lujuria que se traduce en escenas crudas de corte pedófilo, lésbico y sangriento.
En fin, aunque mejorable en su realización, es un buen ejemplo de amalgama que sale airosa de satanismo, pedofilia, crimen y nunexploitation. Además refleja de una manera bastante buena las rutinas de un convento religioso, lo que le da más verosimilitud (algunas escenas se rodaron en antiguos conventos de México).
Además, como curiosidad, este filme puso punto y final a la carrera de Cecilia, quizá por lo duro de los temas que interpretó (no olvidemos que se sitúa en los años 70 del siglo XX).