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Voto de DaniBalboa:
3

Voto de DaniBalboa:
3
5,0
1.165
20 de abril de 2015
20 de abril de 2015
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Si me dices que tiraste un huevo desde un quinto piso y que al caer al suelo no se rompió me lo creo más que esta película.
Adam y ellas trata sobre un tío (Adam), al que llamaremos Don Juan, que primero seduce y luego se acuesta con todos los miembros de la familia de su nueva novia, ya sean hermanas o cuñadas, no importa, el Don Juan no deja títere con cabeza, su hambre sexual es insaciable.
La novedad de esta película, y por lo que le doy los 3 puntos, consiste en que la historia es contada desde los puntos de vista de cada miembro de la familia, de cada víctima que cae bajo el embrujo de este macho alfa plus. Con esto podemos ver la misma historia desde distintos ojos y entenderla mejor o por lo menos tener otras perspectivas, lo cual es bastante interesante, o (mejor dicho) sería bastante interesante si la película en sí fuera buena. Pero, lamentablemente, no lo es.
El principal problema de Adam y ella es que el supuesto Don Juan es absurdo y sus víctimas son patéticas.
No entiendo cómo pudieron coger a este tío como protagonista para darle un papel que está a años luz de encajar con él. Es incomprensible cómo las chicas caen rendidas a sus pies y beben los vientos por él sin ningún motivo. ¿Qué hace?, nada. Este papel pide a gritos no tanto un protagonista guapo, de gran atractivo sexual o lo que sea, si no una persona con mucho carisma, con una personalidad arrolladora que atraiga irremediablemente a las chicas pues no puede ser de otra manera si hablamos de sacrificar la familia por este hombre. Suponemos que nadie le haría eso a su propia hermana a no ser que pierda la cabeza por los encantos del Don Juan o sea una hija de puta de cuidado.
Aquí, sin embargo, tenemos a un Stuart Townsend, con una cara no sé de qué, que sin hacer nada y con más poca gracia que una baldosa se beneficia a todas las que quiere como si bajara directamente del Olimpo a someter a las mortales a su voluntad. Repito, qué mala elección la del protagonista. Pero bueno, demos gracias a Dios de que este error se produjera en Adam y ellas, porque este chaval (sí, este chaval) estuvo a puntito de caramelo de ser Aragorn (finalmente interpretado de manera magistral por Viggo Mortensen) en El señor de los anillos, madre mía... Quién sabe, el día menos pensado relanzan la saga de Harry Potter con Stuart Townsend… ¡en el papel de Hermione!.
Las víctimas del susodicho Don Juan son ridículas. En la película se muestra cómo encandila a cada una de ellas de una forma distinta, moldeándose y cambiando su forma personalidad, sus historias y sus tácticas según la chica que se trate. Eso estaría bien si se hiciera como es debido. Pero en esta película es tal que así:
Víctima 1 (Kate Hudson): “Hola…me gustas mucho…no me atrevía a pedirte el número…te quiero más que a mi vida…eres la mujer de mi vida.” A esto le añade cuatro caiditas de ojos, dos sonrisas de medio lado y ya la tiene en el bote, es el hombre perfecto, nunca conoció a nadie así, todos sus exnovios son pura mierda al lado del gran Adam y en dos días le pide matrimonio en medio de una sala abarrotada.
Víctima 2 (Frances O'Connor): “Hola…tu cara me recuerda a la incomprendida poeta de finales del XIX que fue devastada por un amor tortuoso como podemos ver reflejado, gracias a su incansable pluma, en sus sublimes endecasílabos y en sus crudos sonetos, amargos y deliciosos, fruto de una mente privilegiada y adelantada a su época que supo, como nadie, transmitir esa soledad del yo más pleno, más absoluto y a la vez tan vacío”. Un par de sonrisas juguetonas y Frances O'Connor se pasa la película que no caga por el chaval.
Víctima 3 (Charlotte Bradley): Aquí la táctica es ir directo ya que es una menopáusica encerrada en un decadente matrimonio. “Eh tú, estás más buena que el pan, te metía de todo menos miedo”. Ya está. No olvidemos que esta mujer tiene marido e hijos y que además su propia hermana está prometida con el Don Juan, pero a ella le da igual, con esos piropos tan deliciosos es imposible resistirse.
Víctima 4 (La cuñada): Esta es una mujer que lleva no se sabe cuantísimo tiempo con el novio (hermano de la prometida del Don Juan) pero que por circunstancias de la vida no quiere tener relaciones sexuales con él. Pues no pasa nada, llega el gran Adam, el todopoderoso, el alfa entre los alfas, y en un plis plas se la lleva a la cama. Aquí ya no sabemos ni lo que le dice. Bueno, y además ¡logra excitar hasta al propio hermano de su prometida!.
En fin, película sin pies ni cabeza, pese a que la idea es buena. Y además, las actuaciones son pésimas.
Adam y ellas trata sobre un tío (Adam), al que llamaremos Don Juan, que primero seduce y luego se acuesta con todos los miembros de la familia de su nueva novia, ya sean hermanas o cuñadas, no importa, el Don Juan no deja títere con cabeza, su hambre sexual es insaciable.
La novedad de esta película, y por lo que le doy los 3 puntos, consiste en que la historia es contada desde los puntos de vista de cada miembro de la familia, de cada víctima que cae bajo el embrujo de este macho alfa plus. Con esto podemos ver la misma historia desde distintos ojos y entenderla mejor o por lo menos tener otras perspectivas, lo cual es bastante interesante, o (mejor dicho) sería bastante interesante si la película en sí fuera buena. Pero, lamentablemente, no lo es.
El principal problema de Adam y ella es que el supuesto Don Juan es absurdo y sus víctimas son patéticas.
No entiendo cómo pudieron coger a este tío como protagonista para darle un papel que está a años luz de encajar con él. Es incomprensible cómo las chicas caen rendidas a sus pies y beben los vientos por él sin ningún motivo. ¿Qué hace?, nada. Este papel pide a gritos no tanto un protagonista guapo, de gran atractivo sexual o lo que sea, si no una persona con mucho carisma, con una personalidad arrolladora que atraiga irremediablemente a las chicas pues no puede ser de otra manera si hablamos de sacrificar la familia por este hombre. Suponemos que nadie le haría eso a su propia hermana a no ser que pierda la cabeza por los encantos del Don Juan o sea una hija de puta de cuidado.
Aquí, sin embargo, tenemos a un Stuart Townsend, con una cara no sé de qué, que sin hacer nada y con más poca gracia que una baldosa se beneficia a todas las que quiere como si bajara directamente del Olimpo a someter a las mortales a su voluntad. Repito, qué mala elección la del protagonista. Pero bueno, demos gracias a Dios de que este error se produjera en Adam y ellas, porque este chaval (sí, este chaval) estuvo a puntito de caramelo de ser Aragorn (finalmente interpretado de manera magistral por Viggo Mortensen) en El señor de los anillos, madre mía... Quién sabe, el día menos pensado relanzan la saga de Harry Potter con Stuart Townsend… ¡en el papel de Hermione!.
Las víctimas del susodicho Don Juan son ridículas. En la película se muestra cómo encandila a cada una de ellas de una forma distinta, moldeándose y cambiando su forma personalidad, sus historias y sus tácticas según la chica que se trate. Eso estaría bien si se hiciera como es debido. Pero en esta película es tal que así:
Víctima 1 (Kate Hudson): “Hola…me gustas mucho…no me atrevía a pedirte el número…te quiero más que a mi vida…eres la mujer de mi vida.” A esto le añade cuatro caiditas de ojos, dos sonrisas de medio lado y ya la tiene en el bote, es el hombre perfecto, nunca conoció a nadie así, todos sus exnovios son pura mierda al lado del gran Adam y en dos días le pide matrimonio en medio de una sala abarrotada.
Víctima 2 (Frances O'Connor): “Hola…tu cara me recuerda a la incomprendida poeta de finales del XIX que fue devastada por un amor tortuoso como podemos ver reflejado, gracias a su incansable pluma, en sus sublimes endecasílabos y en sus crudos sonetos, amargos y deliciosos, fruto de una mente privilegiada y adelantada a su época que supo, como nadie, transmitir esa soledad del yo más pleno, más absoluto y a la vez tan vacío”. Un par de sonrisas juguetonas y Frances O'Connor se pasa la película que no caga por el chaval.
Víctima 3 (Charlotte Bradley): Aquí la táctica es ir directo ya que es una menopáusica encerrada en un decadente matrimonio. “Eh tú, estás más buena que el pan, te metía de todo menos miedo”. Ya está. No olvidemos que esta mujer tiene marido e hijos y que además su propia hermana está prometida con el Don Juan, pero a ella le da igual, con esos piropos tan deliciosos es imposible resistirse.
Víctima 4 (La cuñada): Esta es una mujer que lleva no se sabe cuantísimo tiempo con el novio (hermano de la prometida del Don Juan) pero que por circunstancias de la vida no quiere tener relaciones sexuales con él. Pues no pasa nada, llega el gran Adam, el todopoderoso, el alfa entre los alfas, y en un plis plas se la lleva a la cama. Aquí ya no sabemos ni lo que le dice. Bueno, y además ¡logra excitar hasta al propio hermano de su prometida!.
En fin, película sin pies ni cabeza, pese a que la idea es buena. Y además, las actuaciones son pésimas.