R3sacón (2013), también conocida como Resacón 3, es la tercera y última entrega de la trilogía que comenzó con Resacón en Las Vegas. Sin embargo, a diferencia de sus predecesoras, esta película no logra capturar la misma magia y frescura que las hizo tan exitosas.

Una de las principales debilidades de R3sacón es su guion. Aunque intenta cerrar la historia de los personajes de una manera satisfactoria, la trama se siente forzada y poco inventiva. El elemento sorpresa y las situaciones hilarantes que caracterizaron a las dos primeras películas se han vuelto predecibles y carecen de impacto, lo que hace que las risas sean escasas.

El reparto, conformado por Bradley Cooper, Zach Galifianakis, Ed Helms y Justin Bartha, sigue brindando actuaciones decentes, pero la falta de material fresco y el desgaste de los personajes los hace parecer menos inspirados en comparación con entregas anteriores. La química entre ellos se siente menos fuerte y se nota la repetición de chistes y dinámicas que ya hemos visto antes.

La dirección de Todd Phillips también decepciona en R3sacón. Aunque su estilo visual sigue siendo reconocible, la película carece de la misma energía y originalidad que las anteriores. Las situaciones forzadas y la falta de ritmo hacen que la película se sienta anclada y sin inspiración.

Aunque R3sacón tiene algunos momentos cómicos y situaciones absurdas, no logra estar a la altura de la trilogía en general. La falta de innovación en el guion, las interpretaciones menos enérgicas y una dirección que no logra destacar hacen que la película se sienta como la entrega más débil de la serie.

En general, R3sacón es una tercera parte decepcionante que no logra mantener el nivel de sus predecesoras. Aunque aún ofrece algunos momentos divertidos, se ve perjudicada por una trama forzada, personajes desgastados y una dirección poco inspirada.