Añadir a mi grupo de amigos/usuarios favoritos
Puedes añadirle por nombre de usuario o por email (si él/ella ha accedido a ser encontrado por correo)
También puedes añadir usuarios favoritos desde su perfil o desde sus críticas
Nombre de grupo
Crear nuevo grupo
Crear nuevo grupo
Modificar información del grupo
Aviso
Aviso
Aviso
Aviso
El siguiente(s) usuario(s):
Group actions
You must be a loged user to know your affinity with Jasikedevicius
- Recomendaciones
- Estadísticas
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
- Sus redes sociales
-
Compartir su perfil
Voto de Jasikedevicius:
3
2020
6,7
7.104
Serie de TV. Documental
Miniserie de TV (2020). 7 episodios. En el mundo de los propietarios de grandes felinos, la realidad supera con creces a la ficción. Entre los excéntricos y gurús que lo habitan, pocos destacan tanto como Joe Exotic, un cantante de country polígamo y amante de las armas que dirige un zoológico de carretera en Oklahoma. Joe, un tipo carismático pero descarriado, y unos personajes increíbles -entre los que se cuentan capos de la droga, ... [+]
23 de noviembre de 2024
Sé el primero en valorar esta crítica
Sólo he encontrado de interés el segundo capítulo, el titulado 'Cult of Personality' (Culto a la personalidad). El resto es un docudrama sin interés que se mueve entre el morbo y el culebrón.
El segundo capítulo plantea reflexiones muy interesantes en torno a qué pasa cuando un empresario es el encargado de la educación de sus propios trabajadores o qué ocurre cuando busca contratar a personas en situación de vulnerabilidad.
A priori es evidente lo que va a suceder, es EEUU. Los empresarios no son hermanitas de la caridad sino depredadores que olfatean la debilidad ajena para sacar provecho. Ningún empresario se vuelve rico pagando sueldos justos. Esto que, como he dicho, es evidente para cualquier trabajador, deja de serlo en determinadas circunstancias, en ese capítulo de la serie se muestran algunas de ellas.
¿Cómo explotar a un trabajador, exprimirlo hasta dejarlo seco, y que, a continuación, encima te dé las gracias? Siendo tú, como empresario, el encargado de reeducar, de dar forma, a ese pobre hombre hasta convertirlo en tu mula de carga perfecta (trabajar de sol a sol, no quejarse y cobrar una miseria). Tal y como se muestra en este docu, EEUU parece el lugar ideal para eso, un país lleno de jóvenes a medio formar expulsados de sus viviendas paternas, por diversas razones, y que acaban quedándose a la intemperie literal y figuradamente. Qué fácil es en esa situación confundir la libertad con caer en las manos del primer tipo sin escrúpulos que encuentren.
En este contexto de capitalismo casi salvaje, con poco control estatal sobre lo laboral, el jefe es dios dentro de la habitual estratificación que hay en una empresa. Así que no es extraño que se creen situaciones perversas en donde las líneas que separen las relaciones profesionales, comerciales, sentimentales y sexuales sean difusas, generándose así todo tipo de abusos y delitos sin que nadie vaya a la cárcel.
A veces, me pregunto cómo debían educar en la antigua Roma a los esclavos de segunda o tercera generación, a gente que nunca había sido libre. Seguramente, primero, diciéndoles que no eran seres humanos de primera clase y, segundo, diciéndoles que tenían la suerte de tener un amo que les daría utilidad y un objetivo vital como siervos. Ese capítulo de la serie muestra todo esto y más, sin trampa ni cartón, real como la vida misma.
El segundo capítulo plantea reflexiones muy interesantes en torno a qué pasa cuando un empresario es el encargado de la educación de sus propios trabajadores o qué ocurre cuando busca contratar a personas en situación de vulnerabilidad.
A priori es evidente lo que va a suceder, es EEUU. Los empresarios no son hermanitas de la caridad sino depredadores que olfatean la debilidad ajena para sacar provecho. Ningún empresario se vuelve rico pagando sueldos justos. Esto que, como he dicho, es evidente para cualquier trabajador, deja de serlo en determinadas circunstancias, en ese capítulo de la serie se muestran algunas de ellas.
¿Cómo explotar a un trabajador, exprimirlo hasta dejarlo seco, y que, a continuación, encima te dé las gracias? Siendo tú, como empresario, el encargado de reeducar, de dar forma, a ese pobre hombre hasta convertirlo en tu mula de carga perfecta (trabajar de sol a sol, no quejarse y cobrar una miseria). Tal y como se muestra en este docu, EEUU parece el lugar ideal para eso, un país lleno de jóvenes a medio formar expulsados de sus viviendas paternas, por diversas razones, y que acaban quedándose a la intemperie literal y figuradamente. Qué fácil es en esa situación confundir la libertad con caer en las manos del primer tipo sin escrúpulos que encuentren.
En este contexto de capitalismo casi salvaje, con poco control estatal sobre lo laboral, el jefe es dios dentro de la habitual estratificación que hay en una empresa. Así que no es extraño que se creen situaciones perversas en donde las líneas que separen las relaciones profesionales, comerciales, sentimentales y sexuales sean difusas, generándose así todo tipo de abusos y delitos sin que nadie vaya a la cárcel.
A veces, me pregunto cómo debían educar en la antigua Roma a los esclavos de segunda o tercera generación, a gente que nunca había sido libre. Seguramente, primero, diciéndoles que no eran seres humanos de primera clase y, segundo, diciéndoles que tenían la suerte de tener un amo que les daría utilidad y un objetivo vital como siervos. Ese capítulo de la serie muestra todo esto y más, sin trampa ni cartón, real como la vida misma.