Secuela en blanco y negro de la película de culto holandesa The Human Centipede (First Sequence) (2009), en la que repite Tom Six como escritor y guionista. En esta ocasión protagonizada por un perturbador Laurence R. Harvey (The ABCs of Death 2, 2014) y en el que repite Ashlynn Yennie (Fear, Inc, 2016).

Martin es un solitario con problemas mentales que vive con su madre en un barrio marginal de Londres. Trabaja en el turno nocturno como guardia de seguridad en un estacionamiento subterráneo. Allí se obsesiona cada noche viendo una y otra vez la película 'The Human Centipede' en el pequeño televisor de su oficina. Al borde de la locura por culpa de su padre, y su difícil niñez, Martin pone en marcha un plan para emular el ciempiés humano que tantas veces ha visto en su película favorita.

Cuando ves la primera película de la saga, uno se queda con la sensación de que no era tan sádica como su fama dejaba ver, no siendo apenas sangrienta o escatológica más allá de lo que daba a entender y dejaba a la imaginación que no es poco. En esta segunda parte pasa exactamente lo contrario, no se deja absolutamente nada a la imaginación, siendo extremadamente desagradable en lo visual de forma intencionada desde su protagonista (con una interpretación que marca de Laurence R. Harvey), hasta su barbara parte final, y tras ella, un giro final que poco o nada importa al espectador tras lo que acaba de visionar. Si le quitamos todo esto, la película queda en una explotación tirando por el gore salvaje de su primera parte, con una historia que como tal poco interesa más allá de su ya mencionado protagonista.

The Human Centipede 2 es una película sádica en extremo, con ciertas escenas que se nota que su único cometido es impactar al espectador y lo consiguen, siendo únicamente apta para estómagos resistentes e imposible de recomendar.

Nota personal 5/10