Antes de llegar al conmovedor y muy bello personaje de Rapunzel que vemos en la película <<ENREDADOS>>, es posible ir más atrás en los hechos del pasado para descubrir un cuento y una historia verdadera que antecedieron a esta historia. Pero empecemos aclarando que la palabra, Rapunzel, es alemana y significa: Rapónchigo > planta silvestre de flores violeta y acampanadas, la cual tiene una raíz en forma de nabo comestible (con cierto sabor a nueces); las hojas -ricas en vitamina C- se sirven en ensaladas; y también es usada como cicatrizante de heridas y astringente. Al rapónchigo (campanula rapunculus) también se la llama: Campanillas, raponce, rapincho, etc. etc.

Dentro de la tradición oral que recopilaron los hermanos, Jacob y Wilhelm Grimm, en su libro publicado en dos volúmenes, en 1812 y 1815, como: “Kinder- und Hausmärchen” (Cuentos de la infancia y el Hogar), publicado años después como: Cuentos de los Hermanos Grimm”, aparece “Rapunzel”, el cual -como muchos de los otros cuentos incluidos en el libro: La Cenicienta, Hansel y Gretel, La Bella Durmiente, Blanca Nieves…- tuvo resonancia mundial habiendo sido traducido a más de 100 idiomas, y por supuesto, llevado al cine y la televisión en diversas ocasiones.

El cuento trata de una pareja de campesinos que tras lograr, por fin, el embarazo deseado, la esposa se antoja de unos rapónchigos que tiene sembrados una malvada bruja que vive al lado. Dispuesto a quitarle el antojo, el marido se decide a robar algunos, pero, la segunda vez es atrapado por la bruja quien, tras darle algunas raíces, lo compromete a entregarle a cambio la criatura que está próxima a nacer. Al recibir a la bella niña que nace, la bruja Gothel, le pone el nombre de la planta, Rapunzel, y apenas cumple 12 años, la encierra en una torre a donde la “tía” la visitará cada día, trepando por su larguísimo y rubio cabello… pero la niña conocerá a un guapo príncipe y entonces…

Curiosamente, en 1901 (89 años después de escrito el cuento, “Rapunzel”), Francia conoció un hecho que causó horror… y a la nueva víctima se la comparó con Rapunzel, como si el cuento de alguna manera hubiera cobrado vida. Se trataba de una hermosa joven llamada, Blanche Monnier, quien fue descubierta por la policía en lamentables condiciones, tras haber estado encerrada en un cuarto durante 25 años, porque sus padres (un decano de la Universidad Poitiers y una “noble” dama) se opusieron a que se casara con un abogado en bancarrota, pues, consideraron que eso deshonraría a su prestigiosa familia.

Llegamos así, al año 2010, y la productora Disney decide volver a adaptar el cuento, “Rapunzel”, pero, utilizó el título, <<ENREDADOS>> (Tangled), ya que la adaptación que hicieron los directores, Nathan Greno y Byron Howard, partiendo de un guion de Dan Fogelman, es bastante libre y fue pensada como un semi-musical donde hay espacio para la comedia, el romance, la aventura… y solo un poco de drama.

Como es muy común en Disney, aquí Rapunzel es la princesa secuestrada; rey y reina muy nobles son sus padres; y un aventurero non-sancto, Flynn Rider, es el galán que estará a su lado para que… ella lo saque de todo peligro.

Los aportes de la nueva historia son realmente creativos; el agregado de Pascal, el camaleón, y de Maximus, el caballo sabueso, resulta muy divertido. La asociación del rapónchigo (aquí una flor dorada que hace milagros) con Rapunzel, tiene su encanto… y su picardía; y las canciones -aunque no son precisamente brillantes-, no se hacen aburridas porque están agradablemente ilustradas y, además, suelen ser muy cortas… y esto sí, ¡Rapunzel resulta adorable! y reivindica a la mujer con ímpetu de libertad.

Con, <<ENREDADOS>, la diversión está asegurada.