150 delitos y 3 fugas de reformatorios con tan solo 11 años, esa es la historia de Juan Carlos más conocido como "El Pera" un delincuente infantil del sur de Madrid, en concreto del Getafe de los años 70 y proviniente de una familia pobre de barrio. Un film con el que se regresa al conocido cine kinki que tan de moda estuvó en los años 70 y 80 con películas como Perros callejeros o Yo, "El Vaquilla" todos sus protagonistas con algo en común, que erán delincuentes juveniles conflictivos de barrios pobres o marginales. Volando voy sigue y va por esa misma línea, algunas escenas están rodadas en Léganes y concretamente en la Cemu "un centro de acogida para muchachos con problemas familiares o sociales", del cual yo he tenido y tengo algunos amigos. De la película poco más que contar, lo más destacable es la ambientación de la época, la persecución en coches de Toledo por la noche, la actuación del niño que hace de Pera y la de Fernando Tejero que no lo hacen mal... y el cameo del propio Pera en la película.