Los Javis se basan en el drama familiar de Flos Mariae para hacer esta caricatura exagerada e inverosímil.

Los personajes son odiosos y por eso parecen poco creíbles. Si la historia estuviera basada en alguna familia fanática estadounidense la habría comprado mejor. Pero ubicando la acción en España, me parece pasada de vueltas.

Albert Pla, aunque también tiene un papel sin demasiado sentido (no me creo esa transición de autoritario y controlador a absolutamente devoto y obediente), me parece que está de premio.

Y han hecho lo mismo que Camino de Javier Fesser: coger a una familia católica conservadora y, inspirándose su drama, caricaturizarles, ridiculizarles y darles hasta en el cielo de la boca, con el agravante y mal gusto de que en ambos casos las familias están vivas y hay un familiar muerto.

Le pongo un 7 porque, pese a todo eso, la serie está bien hecha y algunos detalles bien hilados.
Pero poner el cine al servicio de estas palizas públicas me parece de mal gusto, máxime cuando está claro que en esa familia no hay una persona cuerda (lo que en cualquier otro caso consideraríamos motivo para ser delicados y discretos, en este nos parece gracioso y nos podemos reír de ellos - cosa que yo también hago porque todo es demasiado ridículo...pero en privado).