A mis niños de 8 y 10 años les he mostrado dos películas que creo que enriquecerán su manera de expresarse desde el día que las vieron: El Show de Truman y esta. Ambas cambiaron la manera de expresarme.. ¿Cuantas veces habré dicho desde que la vi que un día o una sitúación que se repite y parece igual que el anterior parece al día de la marmota?

Y es que esta película se te queda grabada a fuego.

No se si se podria haber hecho sin Bill Murray. Ese vitriólico y misántropo presentador de televisión, descreído de todo y rechazado por todos. Se ha acostumbrado a ser así, algo le dice que no puede ser de otra manera y se siente cómodo en su papel. Bill muestra a Phil como alguien vulnerable que se escuda en el humor acido y en el desprecio a los demás para ocultar sus propios miedos y soledades, alguien que no puede soportar la compañía de nadie, ni siquiera de un perro; y de repente se ve inmerso en un bucle sin fin del que, cual la bella durmiente, solo el amor verdadero y desinteresado podrá rescatarle.

Estupenda película que ha alcanzado fama hasta tal punto que es el único caso que conozco que es conocida, no ya por su simplona adaptación al español de su título, sino incluso su título original en ingles, quedándose para todos nosotros como El Día de la Marmota... para siempre.