Esta película de Woody Allen es famosa por ser un oasis en el desierto. Un drama que se aleja de las comedias habituales del cineasta. Y es un drama en mayúsculas. La capacidad de irnos metiendo en la historia, de ponernos nerviosos con los acontecimientos, es fabulosa. Un profesor de tenis encuentra trabaja en un club que le hace enamorarse de un chica perteneciente a una rica familia. Entra en contacto con la alta sociedad, pero también con otra mujer, la más hermosa y sensual que puede existir, interpretada Scarlett Johansson. Esta historia atrapa al espectador, lo arrastra, y lo hace llegar hasta un final acorde con las circunstancias.