Estoy de acuerdo con otras críticas en que ni Jessica Lange ni Armin Müller-Sthal hicieron buenos personajes, solo salieron del paso.

La historia es buena pero su presentación no lo es, no hay sorpresa, tensión, no llega a emocionar el curso actual de la trama.

La película se levanta cuando declaran los testigos hungaros, cuando Ann visita a la pariente del hombre de la cicatriz en la cara y hasta la curiosa cajita de música emociona.

Es decir, la historia es buena, ¿Porqué la película no? ¿Son los actores principales? ¿Es la dirección de cámara? ¿Es el director?

Me gustó ver las investigaciones que conlleva aparejada una buena defensa y la incompatibilidad emocional de representar a alguien con vínculos afectivos.

Me gustó el desenlace de la película, y entre los actores "americanos" el fiscal y el hijo de Ann Talbot.