La película es mala de por si.
La trama es pueril, las actuaciones son todas ellas mediocres sin más.
Las plataformas han optado hace tiempo en inundar de bazofia directamente sus catálogos, donde prima la cantidad sobre la calidad (donde Netflix reina).
Guion, dirección, todo es malo con ganas.
Uno se puede ahorrar el ver esta cosa y gana ese tiempo, para lo que sea.

Intenta ser una mezcla, entre Air Force One y la Jungla de Cristal pero con una mujer de protagonista, como marca la agenda, y un puñado de malos actores. Un desastre de película, malos y cutres efectos. Si se ve es porque en PrimeVideo se la pondrán a todo el mundo delante hasta que la vean!!
En los 10 primeros minutos, la imagen y los diálogos gritan que es una serie B, es incluso peor que los peores refritos de ideas de Netflix.

El nivel de propaganda basura estadounidense es directamente proporcional a lo mala que es la película. 5 minutos de El ala oeste de la Casa Blanca Valen como 175 veces más que toda esta película. La idea es absurda , el guión es la cosa más mala y más tonta que he visto, los diálogos elevan el concepto de cliché a un nivel protagónico, los personajes son maniqueos, las actuaciones olvidables, la dirección ridícula, las localizaciones dan hasta risa. Lo malo nones que sea un despropósito total, lo malo es que Amazon Prime nos la cuele como gran estreno. Yo creo que todos vemos lo que es Estados Unidos ahora, lo que es un presidente de EEUU y creo que en el resto del mundo estamos ya cansados de ver una y otra vez está imagen idealizada, bondadosa y amable del Gobierno que nos tratan de colar como propaganda desde hace más de cien años y qué cuanto más se da de bruces con la realidad, menos sentido tiene. Y luego esos jefes de estado y sus familiares que son todos como Bruce Willis en La jungla de cristal.. Y al final, EEUU salva al mundo. Es basura radiactiva. Y si este es el camino que va a tomar el cine estadounidense y sus financiadores estrella como Prime pues está perfectamente alineado con el resto de basura estadounidense: política, económica, cultural.

Mala, horrible, sosa, predecible...

Tiene todos los ingredientes de película moderna en plataformas de streaming. Desde malas actuaciones hasta la mujer protagonista que nadie se cree. Todo ello vendido como si fuese un thriller de acción noventero al mas puro estilo La jungla de cristal cuando no llega a ser la versión de hacendado de un mal telefilm de los 00s.

Acostumbrado como estoy a un género de acción en clara decadencia, donde faltan héroes y heroínas a las que tener verdadera simpatía por sus hazañas, me da la impresión de que estáis siendo un poco malos con ‘G20’ por el simple hecho de ser lo que es: una patriotada que sigue la estela de ‘Air force one’ o la reciente trilogía de ‘Objetivo: La casa blanca’. Espero que sea eso, y que no estéis mirando con lupa que haya «presidenta».

Servidor, que supo disfrutar de las películas anteriormente mencionadas ha sabido congeniar con la presidencia de Viola Davis en modo actioner y disfrutar de una película que es perfectamente consciente de lo que es: un entretenimiento palomitero para pasar la tarde en casa, porque para eso ha ido a streaming. ‘G20’ cumple, con creces, justo lo que se propone y no hay que pedirla mucho más. De hecho, hasta suponía que el villano de Anthony Starr iba a ser un émulo humano de Patriota… es justo lo que buscaba.

No la pidáis más, que cumple.

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